Manuel López (Especial para P-ES).- El presidente Barak Obama acude a un baile. El guión de la imagen gráfica es archiconsabido: el presidente, de riguroso esmoquin, llega andando sobre la alfombra roja del brazo de la radiante primera dama. Caminan despacio, miran al unísono a los lados, saludan para la foto levantando leve y calculadamente las manos, etcétera... ¡Foto!
Pues nada de eso. La Administración Obama emprende un nuevo rumbo en cuando a estilo de imagen. Una de las fotos que distribuye la Casa Blanca con la más alta resolución, una imagen informal y dulce donde las haya, perfectamente pensada, meticulosamente planificada y mejor ejecutada aún, es la estampa del presidente del país más poderoso de la tierra desanudándose la pajarita como cualquier hijo de vecino en un ascensor al término del baile oficial montado en el ascensor camino de casa.
La firma de la foto desvela el secreto a voces de esta foto oficial/informal del nuevo estilo Obama: Photo White House by Pete Souza. El nuevo fotógrafo oficial de la Casa Blanca se debe ahora al patrón, el Gobierno de los Estados Unidos de América, por lo que ha de orientar su trabajo al gusto de quien le paga. Los asesores de imagen del presidente dirigen su trabajo y seleccionan las fotos, cuando hace al caso con la aprobación del propio presidente. Normal.
Igual de posada es esta otra foto, obra de Callie Shell, fotógrafa que conoció a Obama en un mitin hace cuatro años y no ha dejado desde entonces de seguirle con su cámara. Su reportaje para Time, al que pertenece esta foto, le valió el premio World Press Poto en la categoría de reportajes.
Las de Shell y Souza parecen a primera vista la misma foto, pero no. Hay una diferencia de matiz fundamental: la de Time es una imagen informativa; una imagen posada y autorizada, pero fotoperiodismo al fin y al cabo. Esta imagen resalta el protagonismo de Obama, pero no aislado en una toma posada de foto oficial, por más informal que sea, sino en una foto real como primus inter pares, pero en pie de igualdad con un grupo de personas que bien podríamos llamar gente normal.
La foto de la Casa Blanca vende al presidente de los Estados Unidos de América. La de Time, información sobre la persona de Barak Obama. He ahí la diferencia entre la comunicación visual corporativa o institucional (propaganda) y el fotoperiodismo (información).
Leer aquí el artículo completo
Pues nada de eso. La Administración Obama emprende un nuevo rumbo en cuando a estilo de imagen. Una de las fotos que distribuye la Casa Blanca con la más alta resolución, una imagen informal y dulce donde las haya, perfectamente pensada, meticulosamente planificada y mejor ejecutada aún, es la estampa del presidente del país más poderoso de la tierra desanudándose la pajarita como cualquier hijo de vecino en un ascensor al término del baile oficial montado en el ascensor camino de casa.
La firma de la foto desvela el secreto a voces de esta foto oficial/informal del nuevo estilo Obama: Photo White House by Pete Souza. El nuevo fotógrafo oficial de la Casa Blanca se debe ahora al patrón, el Gobierno de los Estados Unidos de América, por lo que ha de orientar su trabajo al gusto de quien le paga. Los asesores de imagen del presidente dirigen su trabajo y seleccionan las fotos, cuando hace al caso con la aprobación del propio presidente. Normal.
Las de Shell y Souza parecen a primera vista la misma foto, pero no. Hay una diferencia de matiz fundamental: la de Time es una imagen informativa; una imagen posada y autorizada, pero fotoperiodismo al fin y al cabo. Esta imagen resalta el protagonismo de Obama, pero no aislado en una toma posada de foto oficial, por más informal que sea, sino en una foto real como primus inter pares, pero en pie de igualdad con un grupo de personas que bien podríamos llamar gente normal.
La foto de la Casa Blanca vende al presidente de los Estados Unidos de América. La de Time, información sobre la persona de Barak Obama. He ahí la diferencia entre la comunicación visual corporativa o institucional (propaganda) y el fotoperiodismo (información).
No hay comentarios:
Publicar un comentario